En pocas palabras, el movimiento Occupy Wall Street ha alterado, efectivamente, los parámetros del juego. ¿Pero… y Puerto Rico, qué está haciendo?
En pocas palabras, el movimiento Occupy Wall Street ha alterado, efectivamente, los parámetros del juego. ¿Pero… y Puerto Rico, qué está haciendo?
Ahora nos tenemos que volver a preguntar, ¿tenemos las agallas para decirle no al lucro, o simplemente vamos a esperar a que nos den entrada a ese 1 por ciento?
Esto de “fumarse un moto” suena a falta de madurez y caprichos infantiles. Sin embargo, en ese símbolo de la decadencia hippie y la rebeldía de los años ’60 convergen una serie de datos sumamente interesantes.
Welcome to Bioisland. Y si no te gusta, pues tómate una Xanax para el obligatorio ataque de pánico cuando veas los planes que tienen para tu querida isla. Sigan eligiendo a estos acomplejaos, a ver cuánto nos duran los encantos naturales de la isla.
Las estructuras de control social, económico y cultural se repiten sin cesar y sin cuestionamiento. La peor de estas estructuras, de estos sistemas de control, es la llamada Guerra contra las Drogas, así, con mayúsculas…