Aunque las protestas que comenzaron el año anterior crearon una concientización de los problemas de Brasil, es imposible saber si habrá cambios profundos. Aún así, son muchas las huellas del Mundial.
Aunque las protestas que comenzaron el año anterior crearon una concientización de los problemas de Brasil, es imposible saber si habrá cambios profundos. Aún así, son muchas las huellas del Mundial.
La avalancha de goles se fue convirtiendo en tristeza y luego en profunda humillación, incluso más, en un vejamen, «vexame», una palabra que es más fuerte que humillación y vergüenza.
Los goles usualmente son conocidos por su belleza, dificultad, importancia, pero también por cómo se narran. Así quedan registrados en la mente de los oyentes, y en la era de la televisión, de los televidentes.
Con los altos costos para asistir a un Mundial, desde los boletos aéreos, entradas para partidos, hospedaje y gastos diarios, son muchísimas las personas que lo viven desde los bares.
Recién conlcluye al primera fase de la Copa Mundial de Fútbol y con 16 selecciones que regresan a su país y un aluvión de curiosidades deportivas que presenta la autora.
«Nuestro Palacio de Invierno no está en San Petersburgo, sino en Brasil. Allí, en el mítico Maracaná, derrotamos la monarquía anquilosada de España».
La gente en Salvador es muy hospitalaria y simpática y no hay quien, trabaje o no en el evento, que no lo haga con una sonrisa. Y luego te dicen “beleza”, que es algo como nuestro “chévere”.
En una encuesta sobre el Mundial, a la pregunta de cuál selección quieres que pierda, la mayoría contestó Argentina, Estados Unidos e Irán.
Las protestas no son contra el fútbol, sino contra algunas prácticas administrativas y contra los chanchullos surgidos de la realización del evento. El Mundial ha supuesto una colosal inversión.
Megaeventos, como el Mundial o las Olimpiadas no deben ser exclusividad de unos pocos, pero las exigencias de los organismos que los regulan lo hacen cada vez más cuesta arriba.
El ritual de tocar los himnos nacionales de los equipos que se enfrentan en el Mundial no está ajeno a la polémica, pues unos los cantan, otros tararean y hay quienes los boicotean.
A menos de un mes del primer partido, comienzo esta serie de notas futboleras, para pompearnos a los que nos gusta este deporte y que esperamos este verano con ansias… ¡desde que terminó el de Suráfrica!