En peligro la agricultura en Santa Isabel
Ante la crisis de alimentos que vive el país y el reciente anuncio del contrato entre la Autoridad de Energía Eléctrica y Pattern Santa Isabel, LLC, de $215 millones de dólares por un plazo de 20 años que pretende instalar y construir molinos de viento en el área sur, la Asociación Nacional de Derecho Ambiental busca educar al respecto en un foro que será parte de la VI Jornada Ambiental de la Asociación Nacional de Derecho Ambiental (ANDA). El Foro: Necesidad energética v. Seguridad Alimentaria, será este jueves 7 de abril de 2010, a las 7:30pm en el Aula Magna de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico y es abierto al público en general.
Prensa Comunitaria publicó la pasada semana la información sobre la preocupación comunitaria ante el inicio del proyecto. En septiembre de 2010, la Autoridad de Energía Eléctrica contrató con la compañía Pattern Energy, a través de su subsidiaria Pattern Santa Isabel, LLC, para la construcción de un proyecto de molinos de viento que impactaría unas 3,700 cuerdas de los terrenos agrícolas más productivos de Puerto Rico. Los terrenos, localizados en el municipio de Santa Isabel, han sido seleccionados para la realización de una construcción que, además de impactar producciones millonarias de alimentos, impactará directamente a cientos de residentes de las comunidades colindantes como Felicia 1, Felicia 2, Descalabrado, Central Cortada, Cayure, Boca Velázquez, Jauca 1 y Jauca 2.
El Censo Agrícola Federal clasifica a Santa Isabel como el municipio de mayor producción agrícola de Puerto Rico. La agricultura del área, además de generar miles de empleos, comprende siembras de tomates, pimientos, melones, calabazas, berenjenas, repollo, maíz, cebollas, soya, girasol y sorgo, farináceos, mangó, cítricos, quenepas, entre otras. El terreno donde se contempla construir 65 turbinas eólicas, cada una de 430 pies de altura, está catalogado como «prime farm land» o terreno agrícola altamente productivo.
La compañía contratada reconoce en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA-F), aprobada por la Junta de Calidad Ambiental a finales de noviembre de 2010 (después de haber contratado), que «[l]os predios propuestos para el desarrollo del Proyecto son terrenos agrícolas y están zonificados bajo la Junta de Planificación como Distrito Agrícola AP-1 (Agrícola-Productivo). Este terreno, cuya continuidad en uso agrícola, se considera de importancia para el País.»
«Reconociendo la crisis alimentaria global, decretada por la Organización de las Naciones Unidas, nos parece sumamente evidente la necesidad de aumentar la producción agrícola en Puerto Rico como medida para atajar nuestra situación de dependencia e inseguridad alimentaria. Partiendo de esta premisa, nos parece incomprensible cómo en la Isla estemos contemplando desarrollar un proyecto que arruinaría irreversiblemente uno de los valles agrícolas más productivos a nuestra disposición. Favorecemos el desarrollo de la energía eólica, pero no a costa de la destrucción de nuestros terrenos agrícolas más importantes.» expresó Salvador Coleman Tió, estudiante de tercer año de la Escuela de Derecho de la UPR y portavoz de ANDA, Capítulo Estudiantil.
Las comunidades colindantes al proyecto han expresado preocupación sobre la rápida elaboración de un proyecto tan abarcador sin contar su insumo y participación. La información que tiene la comunidad surge exclusivamente de noticias publicadas en distintos medios de comunicación. Por ello, las comunidades están desarrollando un plan de organización y apoderamiento en defensa de sus derechos.
El Foro: Necesidad energética v. Seguridad Alimentaria, a las 7:30pm en el Aula Magna de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico y contará con la participación del microbiólogo Arturo Massol de Casa Pueblo, Javier González del Colegio de Agrónomos de Puerto Rico, Gladys González, economista agrícola de la UPR, y Jorge Gaskins, agricultor orgánico. Para más información sobre esta y otras actividades: http://andaestudiantil.tumblr.com/