No hay que ser profeta para entender que los tiempos actuales auguran un futuro poco alentador. Cuando más escasos estamos de líderes de profunda dimensión espiritual, se levanta una nueva moda de ministros fashion.
102
No hay que ser profeta para entender que los tiempos actuales auguran un futuro poco alentador. Cuando más escasos estamos de líderes de profunda dimensión espiritual, se levanta una nueva moda de ministros fashion.