El PNP, la Estadidad y la Universidad de Puerto Rico

@periódicoelexpresso | lidith ramos
Tendría, que convencer a un porcentaje muy alto de puertorriqueños de votar por la estadidad en un plebiscito. Esto necesitaría ser así para que no cupiese duda en el Congreso de los Estados Unidos de que, una vez aprobada la estadidad, no surgiría un movimiento numeroso buscando la independencia o el retorno al ELA. Cuando en Estados Unidos se ha mencionado esta preocupación se ha hablado de “supermayoría”, hablando de un 80 o 90 por ciento del voto.
Tendría además, el PNP, que preparar la población para entender y aceptar el sistema político estadounidense y participar efectivamente en él. Nada de equipos olímpicos compitiendo a nivel internacional contra los Estados Unidos, nada de reinas de belleza compitiendo contra las candidatas de Estados Unidos, nada de peleas de gallos… nada de “estadidad jíbara”. Si el PNP buscase la estadidad de verdad, tendría que ir explicándole al País cómo funcionan los Estados Unidos en realidad, sin mentiras.
Además, tendrían que lograr unos niveles de auto sostén en la economía de Puerto Rico comparables con los que se tienen en los estados de los Estados Unidos. Esto para evitar que el Congreso rechace la estadidad evitando tener un “estado mendigo” que absorbiese cada vez más recursos y sin capacidad para sufragar sus propios gastos.
Nada de esto que digo es nuevo ni es irrazonable. Todo esto se ha dicho en muchísimas ocasiones en informes y vistas congresionales. Los líderes estadistas saben esto muy bien. Esto que he dicho, significa que si el Partido Nuevo Progresista estuviese verdaderamente interesado en traer a Puerto Rico la estadidad, tendría que defender con extremado vigor la viabilidad de la Universidad Puerto Rico. Veamos por qué.
La tarea de persuadir a los puertorriqueños de las ventajas de la estadidad y la de sostener un partido político que, sin decir mentiras ni conducir a error, prepare al pueblo, requiere muchas personas preparadas a nivel universitario. La gran mayoría del liderato PNP que tiene educación universitaria, los líderes más diestros y coherentes, se educaron en la Universidad de Puerto Rico. Los líderes del PNP que se han educado fuera de Puerto Rico son menos del 5% del liderato de esa colectividad. Si el pueblo estadista va a tener un partido que de verdad adelante sus planteamientos y su capacidad de persuasión necesita el tipo de intelectual que se prepara en la Universidad de Puerto Rico. No una universidad reducida y vulnerada que les enseñe mediocremente a aceptar cualquier tontería o mentira que digan sus líderes, sino una universidad vigorosa, ágil y crítica. La estadidad necesita un verdadero instrumento educativo e investigativo a nivel superior. ¡Si es que estamos hablando en serio!
Si el Partido Nuevo Progresista de verdad creyese en la estadidad, estaría preparando a Puerto Rico para ser económicamente autosostenible. Para eso necesitaría hacer muchas cosas que no hace ahora. Por lo menos, tendría que estimular seriamente la agricultura local, tendrían que conseguir una exención temporera pero prolongada de las leyes federales de cabotaje, tendrían que estimular el ahorro grandemente, crear un plan de desarrollo económico para la Isla y conseguir fondos federales que se dirigieran a estimular y apoyar las actividades económicas productivas y sostenibles en vez de estimular continuamente el consumo.
El papel de la Universidad de Puerto Rico en la creación de una economía autosustentable hacia la estadidad sería crucial. Un proyecto semejante no se puede realizar sin una institución que produzca las investigaciones que hagan eso posible, así como los intelectuales y los expertos que se requieren.
En contraste con esto el Partido Nuevo Progresista no solo ha abandonado lo que verdaderamente tendría que hacer si le interesara la estadidad, sino que ha logrado que en los círculos de gobierno de los Estados Unidos se asocie el nombre de Puerto Rico con el intento de fraude y con la corrupción.
Y si la estadidad no es el proyecto del PNP ¿cuál es? Lo que el pueblo puertorriqueño ha observado dice que la meta del PNP no es la estadidad sino el control total del sistema político, la eliminación de todo mecanismo regulador que no esté controlado por ellos y la constante, continua y persistente apariencia de corrupción.
Si miramos al interior de la colectividad, ¿qué vemos? Hace más de un año que lo que contemplamos es la incompetencia, así como los ataques y sabotajes entre los miembros del alto liderato. ¿Y qué provoca estas diferencias? ¿Será que discrepan entre sí sobre la mejor manera de traer la estadidad? NO. Discrepan sobre quién controla qué y sobre quién controla a quién. Por eso, en vez de defender y proteger la Universidad, la atacan y vulneran. Porque una universidad seria no les sirve como un instrumento de control, porque la Universidad no educa a los estudiantes sumisos que ellos necesitan para su gestión de control, su regateo y su saqueo.
El movimiento estadista puertorriqueño tiene ante sí, en la estadidad, un proyecto muy difícil y demandante, un proyecto para el que la Universidad de Puerto Rico es un recurso indispensable y el Partido Nuevo Progresista es un obstáculo. ¡Ellos tienen la palabra!