Escanea, paga y listo
Hace unos años un ex secretario de trabajo bajo la gobernación de Sila Calderón (Frank Zorilla) se quejaba de que las mega tiendas como Walmart, Sams, entre otras generaban empleos, en su inmensa mayoría, a tiempo parcial, mal remunerados y sin beneficios marginales (como plan médico o plan de retiro). Esta crítica eventualmente le costó su propio empleo al secretario del trabajo.
Resulta patético ver los gobernadores de turno cada vez que se establece una nueva sucursal de Walmart o Sams (ambas de la Familia de Sam Walton) aplaudir y celebrar el evento como si con ello se estuviera contribuyendo a reducir la pobreza.
Antes de los huracanes Irma y María la tasa de pobreza eran graves, con un 44.3% de la población viviendo bajo niveles de pobreza. Después de María se estima que la tasa de pobreza sobrepasó el 52%, según el Centro de Información Censal de la Universidad de Puerto Rico en Cayey.
En 2019, el estado más pobre en la nación norteamericana es Mississippi con una tasa de pobreza de 21.5% y con una tasa de desempleo de 8.1%. Puerto Rico, por su parte, duplica la tasa de pobreza de Mississippi y supera su tasa de desempleo, aun tomando como certera la dramática baja en la tasa de desempleo que informa el gobierno.
Si Puerto Rico fuese estado, sería el estado más pobre de los Estados Unidos.
El 17 de septiembre de 2018 el periódico El Nuevo Día nos anunciaba que Puerto Rico es el tercer país con mayor desigualdad económica entre familias del mundo y el primero en toda América, según datos del Banco Mundial.
Claro que reducir la pobreza y la desigualdad social no son preocupaciones para las mega tiendas como Walmart ni para la Junta de Control Fiscal. En lo que parecen sí estar de acuerdo, es con que todos acatemos la orden del auto checkout: Escanea, paga y listo.
A finales del 2017, Philip Alston, Relator Especial de las Naciones Unidas sobre Extrema Pobreza y Derechos Humanos, se reunió con la directora ejecutiva de la Junta de Control Fiscal impuesta por el Congreso a Puerto Rico (la misma que le cuesta a Puerto Rico 625 mil dólares anuales, más plan médico, retiró y otros jugosos beneficios) como parte de la ley PROMESA. Luego de la reunión el Relator Especial expresó que había pocos indicios de que las inquietudes de protección social figuraran de forma significativa en los análisis de la Junta. Lo cual le parecía sumamente preocupante, sobretodo en momentos cuando hasta el Fondo Monetario Internacional (FMI) insiste en que la protección social debe incluirse explícitamente en las recetas de ajuste, es decir, austeridad.
Señaló además que le parecía esencial que la Junta tomara en cuenta las inquietudes de los derechos humanos y la protección social en la reforma del bienestar, salario mínimo y regulación del mercado laboral. El Relator comentó en su informe que el mejor ejemplo, donde se ilustra claramente la relación entre la pobreza y la ausencia de derechos políticos, era el caso Puerto Rico.
Pero lo que el Relator Especial de las Naciones Unidas verdaderamente no entendía es que la Junta padece del virus del auto-checkout, que responde al interés del imperio corporativo: Escanea, Paga y Listo.
Lo que realmente duele de esta modelidad del auto-checkout ni siquiera es la automatización, la cual obviamente ha sido perjudicial para el mercado laboral, sino más bien cómo esta se ha proyectado, con enorme éxito, como ejemplo de gran progreso.
El auto-checkout se nos vende como una actualización de alta tecnología, pero eso es solo agregar un insulto a la herida: eliminar los trabajos para hacer que las personas que tienen trabajos trabajen más.
Cuando Walmart, Sams y Home Depot instalan un nuevo auto-pago, no está «automatizando» el proceso de pago; lo que está haciendo es simplemente darle la vuelta a la caja registradora y hacer que el comprador haga el trabajo que ellos no quieren pagar. Así, de paso, ganan más y agrandan la brecha de desigualdad social y pobreza que prevalece en el país.
Pero claro ellos al igual que la Junta de Control Fiscal dirán que todo lo que yo digo aquí es mentira. A fin de cuentas, lo importante para ellos siempre será: ¡ESCANEA, PAGA Y LISTO!