“Nos tienen miedo porque no tenemos miedo”
Nos aproximamos a un momento histórico en el que es preciso derrotar las fuerzas autoritarias y dictatoriales a partir de un movimiento dividido en tácticas, pero con un enorme y contundente consenso: defender la Universidad pública.
Así lucen las perspectivas de la lucha que se libra en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico.
HOY se proyectan actos múltiples de desobediencia civil, resistencias mediadas por el arte y la imaginación artística y manifestaciones diversas de un perfil más tradicional, como la «huelga» y los piquetes.
Se estima que más de 200 policías están dentro del campus, a lo que se suma un contingente numeroso de la Fuerza de Choque.
Un estudiante de Física ya fue arrestado. Según relata El Nuevo Día,
…el arresto del estudiante doctoral de física, Carlos Poventud, ocurrió poco después de las 12:00 a.m., luego de que se sentara frente al portón del edificio de Comunicaciones Públicas y lo decretara cerrado.
«Les quiero decir a los estudiantes que no tengan miedo», dijo Poventud, quien es ingeniero, tiene una maestría en física y es estudiante a nivel doctoral de esa materia. Además, dijo que es veterano de la guerra en Irak y ha estado por 17 años en la Reserva del Ejército de Estados Unidos.
Además de la ocupación policíaca del Recinto, el decreto de la Rectora de prohibir todo tipo de actividades, que cuenta ya con la aprobación parcial del Tribunal Supremo, constituye una nueva pieza del andamiaje autoritario.
Waldemiro Vélez Cardona, representante docente ante la Junta de Síndicos, aclaró que la decisión del Supremo no puede considerarse como una que avale la censura. «El Supremo señala que se pueden regular o limitar actividades que pudieran impedir que la Institución cumpla con su misión, pero no prohibir actividades que están protegidas constitucionalmente, como la libertad de expresión», añadió Vélez Cardona.
Las normas impuestas por la Rectora ya fueron rechazadas por todos los gremios universitarios. El estudiante de Historia Iván Chaar expresó que prohibir «toda actividad»:
«constituye una censura previa (inconstitucional) y es un golpe a esa comunidad universitaria que dirige. ¿Qué es una universidad sin simposios, coloquios, foros, conferencias, música, artes, performance?»
Poco antes Chaar había hecho un llamado a «una semana de desobediencia civil con acciones directas, espontáneas y creativas. ¿Quién se apunta?»
Respecto a la huelga, un mecanismo que no cuenta con amplio apoyo, el ex dirigente estudiantil Roberto Alejandro afirmó lo siguiente:
«La huelga es un medio de lucha. No es un amuleto que se usa en todas las circunstancias. Personalmente, no creo que ochocientos votos eran suficientes para justificar una huelga indefinida. Y mucho menos creo que un proceso social tenga, por necesidad, que restar fuerzas en lugar de aunarlas».
El estudiante de Penn State, ex estudiante de la UPR Rafael René Díaz, dijo lo siguiente respecto a la decisión del Supremo:
«Lo peor es que la reciente decisión del Tribunal Supremo no sólo legitima el «decreto» de Guadalupe, sino que descalifica al poder judicial como herramienta de reclamo ante los atropellos del ejecutivo y legislativo. La transición de una «democracia» a un gobierno autoritario se comienza a palpar cuando esta llamada «separación de poderes» deja de ser un intento para convertirse en un mero texto muerto».
Mientras tanto, circulan decenas de mensajes privados y semi-públicos por las páginas de Facebook llamando a la resistencia creativa ante la ocupación policíaca y la demanda general por fortalecer la Universidad pública y defenderla de los recortes presupuestarios que amenazan el cumplimiento de su misión.