Y DE NUEVO TU VOZ
Y de nuevo tu voz
el asedio de tu voz
El recuerdo que ruge
inevitable seco absorbente
fijo en la transparencia
de un túnel obscuro
firme solido
de indolencia geométrica
asesino del sueño
del hilo de la risa
de la ausencia desnuda.
¿Qué hacer después de abotonada la camisa?
¿Después de amarrarme los zapatos
despacito, qué después?
¿Si al mirarme en el espejo
surgen los otros espejos?
¿Colocaré mi brújula en tu rostro
o miraré al desierto inventado
de las cuentas interminables de la culpa?
Tiburón dócil
claudicante al modo de los hombres
como único horizonte.
Amado de los confines de la Isla
intransferible meretriz del llanto
¿cuál es tu bien y cuál es tu mal?
Aguijón de mi cuerpo
golpe resonante.
Tus palabras ahítas
mutilantes tiernas
tímidas heridas
porque puede más el rencor
en su ejercicio de muralla
que los puentes extendidos por la gracia
Curva del agua
ángulo recto del círculo
fiera enjaulada
tu
rapto de mi mesa
demonio de mi dios
te acercas jaguar
a devorarme con tus finos dientes
a zarpazos dulces
con suaves dentelladas
con el mismo cruel
entre fieras caricias
empujándome asesino
del parais de la rabia
¿huirá macabra la sombra de mi sombra?
¿Sentirá tu frente mi pulso
tomada la otra orilla por asalto
mientras matan al otro Narciso?