I’m just leaning into that a little bit more: El Poblado multiverso de Alegría Rampante
MP: Vamos a comenzar por hablar de la naturaleza de Poblado.
EA: Exacto. La naturaleza. Observar lo natural y los animales es algo bien rico en mi vida, porque es bien meditativo y me hace conectar con una energía y con unos ritmos diferentes. A veces siento que miro cómo las cosas cambian. El even flow de las cosas, como una persona de antes. Tú sabes, como que “ay, los veranos no son iguales, los árboles no son iguales, las hojas ya no caen igual”. Yo siempre me fijo en cosas así.
MP: Es como si la música tratara de recuperar una ruralía o un paisaje que con la deuda y la crisis y los últimos años se nos arrebató.
EA: Creo que tiene que ver con una mirada interna que tengo por el baile. Yo veo mi interioridad como un ecosistema. El asunto del cuerpo y del baile, aunque ya no soy bailarín, me cambió mi manera de percibir el mundo porque estoy bien consciente de mi cuerpo en el espacio. Pero eso tiene un montón de implicaciones. Cuando uno es un bailarín, o un movedor, tú sabes, estás todo el tiempo mirándote. Es como una visión tridimensional y multidimensional todo el tiempo. Toda esta cosa de la naturaleza y el espacio es porque de alguna manera la naturaleza me recuerda pues estar un poco más en silencio, en mi tiempo y conmigo mismo.
MP: Algo que también pienso que está en Poblado con la cuestión del matorral, la cuestión de la reina de las flores, toda la flora que mencionas a través del disco, ¿piensas que hay algo de observar solo a la naturaleza, como un animal? Tu trabajo está lleno de animales. Bernat Tort lo llamó un devenir Animal Politiqueer en la muestra de tu obra en el Museo de Arte Contemporáneo en el 2019.
EA: Quizás también responde a una cosa fantasiosa porque yo soy bien whimsical. Tengo una mirada como de niño. Todo me maravilla. Me paso todo el día con mis perros y estoy todo el día mirándolos como miran y las cosas que hacen, que sé yo. Me encanta esa subjetividad o imaginar como esa subjetividad del tiempo en que ellos están que no es el mío porque ellos no están pensando foward/backwards, ellos están en Now. That’s why we love having animals I think. Because it’s como un constante now, now, now.
MP: En contraste a toda esta cuestión selvática, este ecosistema indomable de matorrales y animales salvajes, parece que el Poblado está siendo ocupado. Hay una especie de fantasía bélica en canciones como “Soldado”, una de mis favoritas del álbum ¿Cómo piensas este elemento?
EA: Yo tengo cincuenta y tres años. ¡Los ochenta! —dice reacomodándose en el piso–Cold War, the constant terror as a queer kid de ser drafted. Esos son años y años de terror. También yo soy un niño que vivía aterrorizado siempre. Gritaba por las noches y aparecía en la puerta de mis papás, y ellos me trancaron para que yo no me les metiera en la cama todos los días— (…) Algunos de esos monstruos están por ahí. Pero sí, siempre ha habido un terror a lo bélico, a la confrontación violenta física. Siempre le he tenido mucho miedo a la violencia ejercida hacia mí como sujeto queer desde niño. Pero también tiene que ver con todo lo que ha pasado en la última década en Puerto Rico. De alguna manera, es la paranoia de sentirme que estamos en peligro. Es algo que me acompaña desde hace mucho tiempo y de ahí sale un poco todo este imaginario. Aunque para mí un soldado también está más dentro del mundo de los sueños. It ‘s more erotic. Es un sueño erótico. No es una pesadilla, es un tipo de sueño que yo tengo mucho. Yo tengo muchos sueños que son como sexuales but there’s something weird about them.
MP: Hay peligro, pero en la canción dices algo así como que no te das cuenta de que esto iba a caer.
EA: Caramba qué vergüenza/es no tener ni pista/y luego ver llover/ a los paracaidistas–Eduardo canta.
MP: Exacto. Hablemos ahora del lenguaje y el juego. Pienso en la canción Sajorí con la talentosa Andrea Cruz. Y tiene que ver con cómo usas y escoges las palabras. Sajorí la usaba mi abuela para decirme que era bien traviesa, – una jiribilla – pero es una palabra que solo se usa aquí con esa noción. Viene del árabe zahorí, que quiere decir, algo así como clarividente. En tu trabajo hay un juego constante con el lenguaje vernáculo, pero también en general con cambiar los significantes y crear algo así como gestos brechtianos, audaces. Acá en esta propuesta nueva con “Joroba de pelo”, en vez de “Jarabe de palo”, que es como un “switch”, como un corto circuito que obviamente produce un efecto en la gente. ¿De dónde vienen estos juegos y este gusto también de jugar con los significados? Porque es muy de poeta te diría yo.
EA: Yo sé qué yo tengo de Viveca Vázquez, y yo sé qué yo tengo de Maritza Pérez, y yo sé qué yo tengo de Kate Bush… Pero eso en específico, I don’t know. I just think it has to do with my fragmented way of thinking, expressing myself. I have a hard time sometimes, como que siguiendo líneas “coherentes”, y estoy poniendo unas comillas porque pues de alguna manera I figure my way around things.
MP: Me sorprende que menciones a Kate Bush porque justo me decía una amiga en común, Ilang Ilang Gutiérrez, que Soldado era como su “Running up that hill”, que en Stranger Things, la serie, es la canción que una de las protagonistas usa para vencer los monstruos.
EA: Es que Kate Bush es mi mamá. Yo digo que ella es mi mamá cultural.
MP: Háblame más de Kate Bush.
EA: Kate Bush es bien importante para mí. Es mi artista favorita. Creo que es la artista que me enseñó en la música, lo mismo que me enseñaron mis otras maestras en otras disciplinas. Es como que, you can do whatever you want, within a song or within an album. You can be different people; you can use different voices. A song can be 4 words, a song can be a little story, a song can be narrated– o sea, hay una esquizofrenia en Kate Bush que para mi es fundamental. Ella es la que me enseñó que todo puede pasar en la música. Es paralelo de lo mismo que aprendí con Viveca y con Maritza pero en ese realm del sonido.
MP: Tienes muchas madres y eso es tremendo. En la escritura, quién es tu maestra o madre de la composición, ¿A quiénes tú lees?
EA: Bueno, yo empecé a escribir tarde, yo empecé a escribir en el 95-96. Aunque Tres reyes, es una melodía de los 80, de cuando yo era chamaquito. Yo creo que a mí me impactó mucho cuando entré a la IUPI, y de momento eres amigo de Mayra Santos. Mayra Santos se hace pana tuya y te da un libro como Anamú y manigua. Entonces de momento a mí me impactó, pero es porque yo no conocía a un poeta. Entonces de momento, el asunto de yo leer el libro que me da Mayra, esta pana que yo tengo ahora, que yo la miro y digo: “Esta mujer es de otro planeta, what the fuck is this… creature?”. Verdad… So, de alguna manera yo sé que ese libro me marcó. Por otro lado, pienso que Cortijo y su combo, Ismael Rivera, es también una entrada bien grande a mi lenguaje. Aunque desde niño siempre me gustó la música más europea, americana y en especial la música disco. La música disco sigue siendo mi música favorita. Yo tengo 53 años y si tú me preguntas “¿cuál es tu tipo de música favorita?”, yo te digo disco music. Period. That’s my favorite music. Donna Summer fue mi primer ídolo. Y hasta el día de hoy todavía yo la tengo oigo y lloro, and you name it…
MP: Pero Cortijo…
EA: Pues Cortijo. Yo no sé qué pasó que en mi niñez, pero recuerdo que yo agarré los discos de Cortijo de papi y dije “déjame oír esto” and I was fascinated por el sonido de la música. This loud sound… y me reía con las letras. Entonces esta idea como de la síntesis. No sé, porque Cortijo no es Silvio, no es Pablo Milanés, o sea, es como, son ideas pequeñas y a mí me provocó bien, bien, bien, bien cabrón. Bien cabrón, bien cabrón. Y, por ejemplo, yo tengo una canción que yo sé que es Cortijo y su combo. “Tres Reyes” de Superaquello.
—Eduardo tararea–Pon mi mano dónde te duele…
MP: ¡Wow, mi canción favorita de Superaquello!
EA: Cuando la hice, me decía “esto es Cortijo y su Combo”. Si tú le pones el ritmo de Oriza. Yo casi me puedo imaginar a Ismael Rivera, que me perdonen los puristas, pero cantándola, o sea por la melodía.
MP: Oh, wow, tú te imaginas una versión “salseada” de eso…
EA: Siempre la he querido grabar, y se lo digo a los compañeros pleneros y cosas, y me hacen “Que interesante…” (risas)a Tito, traté…
MP: Pregúntale a las pleneras. Pregúntale a Miosotis, a Piquete, a que Piquete te la hace.
EA: Claro, que son las que están– las mujeres son las que están shifting, pero bueno. Otros dos elementos importantes para mi escritura fueron Silvio Rodríguez, que de jovencito yo decía: “Ay, yo no quiero oír eso”. En parte porque me intimidaba. Pero algo pasó en Nueva York. Y todo eso combinado con un proceso de psicoanálisis, de momento yo empecé a escribir canciones. It’s not something I had planned. I always assumed that I wanted to make music, but I couldn’t write lyrics. Y por eso Superaquello. Empiezo el proceso de psicoanálisis. Mi vida cambia. Empiezo a escribir canciones.
MP: Leí un estatus tuyo hace poco en que decías que te alegrabas por Villano Antillano porque tú hubieras querido estar donde está ella a su edad. Lo decías, así como con un sentimiento de orgullo. Pero en parte no habría un Villano sin Superaquello, ¿o cómo ves la conexión con tu trabajo, siendo el rock indie y el rap dos cosas tan diferentes?
EA: Bueno, Villano es bien cariñosa conmigo, siempre que me ve (yo no la conozco), ella me ve y me saluda y me abraza. Como que una cosa de respeto. Pero yo pienso que las generaciones de ahora tienen la ventana del Internet. So, I think there is an awareness that maybe I did some things before them, porque yo creo que soy el primer cantante pop puertorriqueño que canta sobre– desde el queerness. Porque hay gente que dice “no, fulano era gay, mengano era gay”, but yeah did they sing it. Was that the subject matter of the song? Y no te lo digo como de guille, como “I’m the first, honey!” You know what I mean? Pero yo creo que esas generaciones han absorbido un mundo que nosotros no tuvimos.
MP: Me hiciste pensar en Manuel Ramos Otero, uno de los primeros que escribe sobre ser gay en la literatura boricua.
EA: Pues es de los pocos escritores que yo he leído bastante… y like I’m not a reader, y el impacto que ese hombre ha tenido en mi vida es enorme, y en mi escritura también, lo que pasa es que a mi me da pachó decirlo. Especialmente, la escritura mía de ahora…
MP: Eso es tremendo. ¿Y hay algo específico que te acuerdes ahora de Ramos Otero, como de alguno de los libros que hayas leído?
EA: Bueno, yo lo primero que leí fue Concierto de metal, y yo me acuerdo –como una persona que se me hace un poquito difícil leer– el rapto de leerlo. Me acuerda cuando yo leí Cortázar. Yo tratando de leer I thought Cortázar was fascinating somehow, because it appealed to my whimsical nature toda esta cosa del realismo mágico. I wasn’t using that language back then, pero había algo que me— había un hook para alguien como yo fantasioso en la manera en que Cortázar escribía. Que yo podía identificar, aunque no podía leerlo todo. ¡Nunca pude terminar de leer la novela aquella Rayuela y cosas así, pero en los formatos de cuentos cortos I could go like “Oh my god! Oh my god!”. Pero Manuel Ramos Otero yo leí el Concierto de metal y yo lloraba.
MP: Concierto de metal para un recuerdo y otras orgías de soledad. (Editorial Cultural, 1971).
EA: Sí. Yo lloraba al final de los cuentos. Hay un cuento de unas cheerleaders en un avión, que creo que se llamaba Bola de fuego . Me viví ese cuento, yo estaba en un diner en Nueva York y cuando terminé de leerlo empecé a llorar. There is something so wild about the way that he writes, hay como una cosa como… Tu eres una escritora, so, obviamente yo no soy una persona del mundo literario, pero me doy permiso. Yo lo encuentro como… Fierce… Voy a usar esa palabra como maricona. There’s like a fucking… Una bravura con la que él escribe. Tan salvaje el espacio que él se permite entrar en su escritura e invitar a uno a entrar. ¡Mira, se me paran los pelos! – I can’t explain it. I just can’t explain it. Don’t know what was happening, don’t know que pueblo es este, donde hay un cementerio, donde el mar está– donde hay pulpos y la madre y el vampiro y la jodienda. Yo estaba completamente ahí con él. Y yo nunca había tenido una experiencia así. ¡Entonces ahí yo empiezo a escribir cosas un poco más como woooo! Empiezo a escribir cosas como Capitanas y me empiezo a dar un poquito más de permiso con el lenguaje.
MP: Esto que me dices me tiene el corazón a millón. Me hace tanto sentido. Es un gran hallazgo, que no debería sorprender ahora que lo pienso. Bueno pues, una pregunta más porque me has dicho ya un montón de cosas bien hermosas. Háblame de las fotos tan bellas que creo que me habías dicho que las hizo tu sobrino.
EA: Mi sobrino Usiel Orlandi Alegría. Eso es una de las cosas más maravillosas que a mi me han pasado en mi vida, y fue él. Pero es mi sobrino, desde niño él me está oyendo, y oye mis discos. Y ya cuando empieza a crecer me dice “well, this is not that good”, y de momento él se convierte en el artista de la familia. El ahora es el artista de la familia. Y es un artista que trabaja muchas técnicas diferentes, está loco. Se pasa constantemente shifting techniques. Le da con grabar en esto, le da con picar, con cortar, con pegar…Fue una idea de él. Y es que yo decía, “Ay, no sé qué hacer con el disco, los visuales”. Entonces el salió y dijo “Oye y si vamos a casa de gente y les tomamos fotos, y les ponemos cosas encima”. Y nada. No, terminó siendo en mi casa. El instaló una tela en casa, en mi cocina. Mi cocinita que es así chiquita como esto. Entonces citábamos la gente en casa. Y yo sacaba trapos, y los ponía y…
MP: Y háblame de qué es eso de “La otra música puertorriqueña”.
EA: Yo soy, verdad, discípulo de Maritza, y discípulo de Viveka, aquí en Puerto Rico y así como esas señoras son como madres para mí, yo digo hadas madrinas culturales, pues también están mis tías culturales, Awilda Sterling, Petra Bravo. Todas mujeres. Pero el asunto es que hay como una historia que no está escrita. Yo me mudé a Puerto Rico en 1997 de Nueva York a fundar Superaquello. Yo vine a fundar Superaquello. Porque yo vine a crar un acto que iba a ser revolucionario. Yo quería cambiar el panorama cultural del país a través del Pop. Del art pop, yo vine loca a cambiar las cosas con mi weird, goofy art pop music. De alguna manera yo siempre en mi trabajo estoy paralelamente hablando de mi, pero yo estoy tratando de documentar mi entorno. Porque yo siento que nadie lo hace y para mi Poblado es mi manera de jugar con toda esa gente a diferentes niveles. Nosotros, este entorno al que yo estoy tratando de apuntar con mi disco es parte de un mundo enorme. O sea, en Poblado es esto. Están las pleneras, las bomberas, los bomberos, los pleneros, las raperas, los raperos, los queer, o sea It’s such a huge scene, Puerto Rico is insane. En los ochenta, cuando empecé a salir, y empecé a soñar con que yo quería tener un grupo, no había nada de esto que nosotros estamos teniendo ahora.
MP: Pues vamos a ver, a terminar por ahí ¿qué nos puedes adelantar de la sorpresa de este sábado en La Goyco? ¿Qué va a ser este evento de Alegría Rampante?
EA: Es un concierto de Alegría Rampante. Es un concierto de Alegría Rampante con mucha emoción de ser un concierto para la comunidad, que es algo que siempre había querido, tú sabes. Santurce es mi hogar espiritual, aunque yo no vivo acá. No me estoy inventado la rueda. Es un concierto de Alegría Rampante, hay algunos de los invitados, porque no los podía tener a todos. y Im just sort of leaning into the homenaje a estos artistas un poco más. I’m just leaning into that a little bit more. Eso se verá allí porque es simple. Im just leaning in a little bit more into these artists because they are amazing. Tienen una obra increible, go check it out.
Fotografías de Uziel Orlandi Alegría.