Marcha 8 de marzo: ¡las mujeres exigimos equidad y justicia social!
Mary Rivera vive en nuestras memorias como la valiente y dedicada activista por los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Mary dedicó su vida a la educación y a la lucha por el acceso a los servicios de salud reproductiva para todas las mujeres en Puerto Rico. Mara Negrón vive en nuestras memorias, así como en las propias letras que plasmó para realizar escritos feministas. Mara ejerció como profesora y directora del Programa de estudios de la mujer y género de la Universidad de Puerto Rico. Ambas en sus respectivos espacios de lucha, a través de la palabra y la acción, dejaron profundas huellas en las generaciones de mujeres con quienes interactuaron.
La defensa de los derechos humanos de todas las personas es una de las fortalezas del movimiento de lucha de las mujeres. Hoy el pueblo puertorriqueño tiene a uno de sus hijos, que ha estado encarcelado por 31 años, en condiciones de tortura y represión por el solo hecho de defender la Independencia para su País. Los más diversos sectores aquí y en el resto del mundo han juntado esfuerzos y voluntades para lograr la excarcelación de Oscar López Rivera durante este año.
En el Día Internacional de la Mujer, fecha en que recordamos a aquellas que dedicaron sus vidas a reivindicar nuestros derechos como humanas, nos unimos al esfuerzo colectivo para abogar por los derechos humanos de uno de los prisioneros políticos más antiguos en las cárceles de Estados Unidos y exigir su excarcelación.
Equidad
Las mujeres siempre hemos caminado con la bandera de la lucha por la equidad, siendo un sector poblacional que ha sido objeto de las desigualdades del sistema. Este año esta lucha tiene una vigencia e importancia mayor cuando se discute en Puerto Rico la necesidad urgente de aprobar dos proyectos de ley que intentan proteger a las personas en riesgo de violencia y discrimen, independientemente de su orientación sexual e identidad de género, real o percibida, o de su estado civil.
En un reclamo de PAZ PARA TODAS Y TODOS marchamos para exigir la aprobación del Proyecto de la Cámara 488, que protegería de la violencia doméstica a toda persona independientemente de su estado civil, orientación sexual e identidad de género, real o percibida.
Por un Puerto Rico INCLUSIVO, también exigimos se apruebe el Proyecto del Senado 238, para establecer la política pública del Gobierno de Puerto Rico en contra del discrimen por orientación sexual e identidad de género, real o percibida, en el empleo, en arrendamiento de vivienda y en cualquier gestión gubernamental, pública o privada.
La agenda de equidad está incompleta mientras queden excluidas las mujeres de diversa orientación sexual e identidad de género, real o percibida, o que viven fuera del lazo matrimonial tradicional.
Justicia Social
En nuestro continuo caminar por la justicia social, reclamamos al nuevo Gobierno el cabal cumplimiento de sus compromisos hacia las mujeres, como los siguientes: restablecer la política pública educativa de perspectiva de género que fue derogada por la pasada administración, incentivos para la creación de empleos, promoción de microempresas para el cuidado de niñas, niños y envejecientes, que a la par que ofrecen un servicio, sirven como fuente de empleo.
Exigimos que se apruebe un Plan Universal de Salud que de acceso a los servicios de salud integral y de salud sexual y reproductiva a todas las mujeres sin importar su nacionalidad, condición social, condición de empleo y situaciones de salud previas; que NO excluya a las no asalariadas, contratadas a jornada parcial, cesanteadas, jubiladas o con capacidades disminuidas.
Además, queremos que se reconozca la diversidad de familias que existen en nuestra sociedad. El mundo entero ha ido evolucionando en el entendimiento de que no existe un solo modelo de familia. Por el contrario, existen diversos modelos de familia y los derechos que le asisten a una le deben ser extendidos a todas. Ya es hora de que Puerto Rico se inserte en ese entendimiento global.
En el plano laboral, exigimos la reinstalación en el empleo a las cesanteadas por la Ley 7 y la firma del Convenio de la UTIER AHORA. Exigimos que toda negociación sea justa, sin dilación, al igual que se honren los convenios, aumentos y acuerdos ya negociados. Exigimos remedios justos e inmediatos ante asuntos de discrimen laboral y hostigamiento en el empleo así como medidas legislativas contra la precariedad de los empleos a jornada parcial y sin beneficios. También reclamamos que se extienda al sector privado y a todas las ramas del sector público las enmiendas hechas a la Ley de Personal y Servicio Público para aumentar la licencia de maternidad a 12 semanas. También reclamamos que se establezcan licencias atemperadas a nuestras realidades, que sean extensivas a todos los sectores públicos y privados para tratar asuntos de violencia doméstica y de género, cuidado de envejecientes, pensiones alimentarias, visitas a las escuelas, entre otras.
Entendemos que es hora ya de que se provea seguridad social para las trabajadoras del hogar, las mal llamadas amas de casa, mujeres que han hecho una importante función social no remunerada y que se encuentran desprotegidas en su etapa de vejez.
Censuramos enérgicamente al Gobernador Alejandro García Padilla por echar adelante la privatización del Aeropuerto Luis Muñoz Marín, optando por ser fiel servidor de la voracidad de los inversionistas locales y extranjeros y traicionando los intereses del Pueblo que le dio su confianza en las urnas. Por otra parte, rechazamos los nuevos intentos de privatización de importantes empresas públicas como la AEE y la AAA, Departamento de Educación, Facilidades de Servicios de Salud, Departamento de Estado y cualquier otro servicio gubernamental, que agravaría la precaria situación de los empleos, afectaría seriamente el futuro económico del País y encarecería los servicios al Pueblo. Repudiamos el plan propuesto por la Administración de García Padilla sobre el el Sistema de Retiro porque pone el peso de la carga sobre las trabajadoras y los trabajadores. Basta ya de que carguemos con las consecuencias de las crisis, con la debacle causada por los actos de corrupción y la mala administración de todos los gobiernos. Exigimos que se gobierne para el Pueblo y no para los grandes intereses económicos.
El principio de igualdad, de equidad, es fundamental en las sociedades llamadas democráticas. El reconocimiento y aplicación de esos derechos igualitarios es hacer justicia. Las mujeres insistiremos en ese principio todos los días hasta que sea realidad. De eso se trata nuestro continuo reclamo por equidad y justicia social.