Nunca habrá alguien como Carmelo Ruiz Marrero
El amigo y compañero Carmelo Ruiz Marrero partió de manera inesperada y súbita de este mundo físico durante el pasado martes 6 de septiembre. La noticia me estremeció muchísimo. Tan solo unos días atrás habíamos compartido en espacios comunes. Carmelo siempre estuvo presente en la lucha por un mejor país. Vivió y consistentemente resistió desde muchas trincheras que dominaba a su manera con astucia y afirmación. Carmelo sin duda fue y seguirá siendo un visionario, una persona que estaba muy clara de sus principios, que los puso en práctica durante toda su vida y que verdaderamente estuvo en la vanguardia, adelantado a los tiempos, viendo y practicando lo que muchas y muchos todavía no ven. Carmelo por su constante trabajo y legado fue y seguirá siendo una de las armas secretas más fuertes del Movimiento Ambiental, Agroecológico y Patriota en el país.NOTA DEL EDITOR: A todas y todos aquellos que se quieran despedir de nuestro amigo y compañero Carmelo Ruiz Marrero, el velorio se realizará hoy en la Funeraria Ehret de Río Piedras de 2:00 PM a 10:00 PM y mañana sábado de 9:00 AM a 2:00 PM. La misa será el sábado 10 de septiembre a la 1:00 PM.
Carmelo fue periodista, investigador, educador y formador por excelencia. Siempre iba al grano y provocaba el diálogo de ideas con respeto. Nos deja un gran legado a través de la escritura. Carmelo publicó dos libros importantísimos para Puerto Rico y el mundo: «Balada Transgénica: Biotecnología, Globalización y el Choque de Paradigmas» y «El Gran Juego de Ajedrez Botánico». Además, contribuyó en los escritos iniciales de Pensamiento Crítico, escribió continuamente para el periódico Claridad, publicó para diversos medios de renombre internacional como la Revista América Latina en Movimiento de la Agencia Latinoamericana de Información, escribió en el medio independiente Counter Punch, publicó diversos artículos para el periódico Compartir es Vivir, escribió en la revista 80grados, Diálogo y El Nuevo Día, y publicó y colaboró con diversos colectivos y espacios de difusión en y fuera del país. Carmelo también, fundó el Centro de Bioseguridad de Puerto Rico, el blog titulado «Blog de un Periodista», el blog musical Ionosfera, el Monitor de Energía y Ambiente de América Latina, y escribía y contribuía en la página y blog del Frente Socialista de Puerto Rico. Escribía lo que practicaba.
Carmelo siempre estuvo presente en las luchas por la justicia social en Puerto Rico. Fue el precursor y el que verdaderamente comenzó el trabajo investigativo y de activismo en torno al contexto de la industria de los transgénicos en Puerto Rico y a nivel internacional, muchísimo antes que se discutiera ampliamente. Gracias a Carmelo tenemos a muchas personas formadas y educadas en ecología política en el archipiélago, a través de su participación y colaboración con numerosas organizaciones y colectivos de base en el país. Se formó en la calle y estudiando en la Universidad de Puerto Rico, en el Instituto para la Ecología Social en Vermont, en la Universidad Nacional de Colombia (entre muchas otras) y viajó y vivió en varios países latinoamericanos conociendo y siempre estudiando desde adentro sus luchas. Contribuyó muchísimo en la lucha en contra de la marina en Vieques y fue fiel seguidor de Richard Levins, a quien denominaba el científico del pueblo. Solidario y siempre actualizado y en comunicación con varios movimientos sociales internacionales. A Carmelo le debemos tanto.
Muchos momentos que compartimos, las conversaciones y reuniones que tuve con él siempre eran largas porque era de los conversadores más entretenidos que he conocido. Carmelo te enseñaba mientras hablaba, te hacía el recuento histórico con inclusión de fechas y detalles. A la misma vez tenía uno de los sentidos de humor con que más me puedo identificar. Nos reímos juntos tantas veces. Recuerdo, participar en procesos de escritura con el para educar sobre la importancia del desarrollo y promoción de la agroecología como alternativa al modelo industrial agrícola y los transgénicos. Cualquier pregunta o duda que alguien tuviera, Carmelo contestaba rápido. Además, ayudó muchísimo con trabajo de política pública amparado en justicia social. Compareció y documentó a muchísimas comisiones y agencias sobre sus posturas y trabajos. Fuimos juntos con ponencias escirtas en mano a comparecer a favor de que se apruebe el bachillerato en agricultura sostenible, en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Utuado, a favor de que se aprobara el proyecto del Bosque Modelo y que incluyera énfasis en agroecología y zona libre de transgénicos, a favor de un proyecto de etiquetación de productos transgénicos, entre muchos más. Su compromiso fue y seguirá siendo inquebrantable.
Carmelo, además, tenía un lado musical. Recuerdo la primera conversación que tuvimos de música, cine, cultura popular, y contenidos de ciencia ficción. La sincronía fue instantánea. Su relato de la escena musical independiente subterranea de finales de los ochenta y durante los noventa en Puerto Rico, era otro tesoro escondido que solo el podía relatar con lujo de detalle. Descubriendo así yo muchas de las raíces de la escena que hoy perdura y que todavía aguanta. Carmelo, también tocaba música y realizaba exquisitas compilaciones.
Carmelo es un patriota. Que no quede duda que luchó a favor de la justicia social en todas sus vertientes. Luchó por la agroecología, por la independencia, siempre argumentativo y persuasivo en contra de los transgénicos, por el socialismo, y por tanto más… Trabajaba también con las contradicciones y las comentaba. Su lenguaje y acercamiento siempre fue accesible.
Todavía no puedo creer su muerte. Tanto es así, que a pesar de saberlo, pienso que todavía hay espacio para que llegue una noticia de que se recuperó de repente, por lo sorpesiva que fue su partida. Escribo para tenerlo presente pero también para no pensar en un final. Su legado, y los materiales que ha generado son dignos de una biblioteca o archivo en su nombre para las justas causas en el país y el mundo.
Hoy cosechamos sabiduría, experiencia y esperanza. Todavía andamos descubriendo tus muchísimas virtudes a través de los relatos de tantas personas que te quieren. Gracias Carmelo.
A todas y todos sus amigos, personas que lo conocieron, que lo vieron, y en especial a su familia, muchísima fuerza, muchísima paz y muchísimo amor en este tiempo. El amigo y compañero, sin duda es uno de los más grandes que vamos a tener en esta vida y el sigue en su gesta continua porque pidió ser donante de órganos para otros y otras que estén en necesidad.
«Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos». – Ali Primera
CARMELO RUIZ MARRERO SIEMPRE PRESENTE
Aquellas y aquellos interesados en conocer algo de sus mundos comiencen visitando:
http://carmeloruiz.blogspot.com
http://ionosferamusic.blogspot.com
http://www.80grados.net/author/carmelo-ruiz-marrero/
*La familia de Carmelo ha impulsado una campaña de recaudación de fondos para los actos fúnebres para quien pueda aportar: https://www.gofundme.com/2nmhhgs
O por correo a: Magali Marrero, Cond. Villa Caparra Tower, 44 Calle A Apt. 8A, Guaynabo, Puerto Rico 00966. O en persona en la funeraria.