Fallece uno de los pilares de la plástica puertorriqueña: Myrna Báez
La familia de quien fuera una de las primeras mujeres en sentar cátedra en Puerto Rico sobre las mujeres artistas en el mundo entero y de cómo deben construir y consolidar su espacio y tiempo como artistas profesionales, informó que los restos de Báez serán cremados y velados en la Funeraria Buxeda. Además, se llevará a cabo un servicio religioso especial en la capilla de la Universidad del Sagrado Corazón.
Todo será informado oportunamente.
En ocasión de su libro Propuesta polémica sobre el arte en Puerto Rico –durante la década del 70–, Marta Traba dijo de Myrna Báez: “Es la persona más cualificada que conozco en Puerto Rico en las artes visuales”, conclusión a la que llegó luego de conocer la obra de Báez.
Por su parte, el historiador norteamericano Edward Sullivan la consideró siempre una de las Maestras del arte latinoamericano: “Puede decirse que inaugura muchas de las tendencias y estilos más importantes que han caracterizado al arte puertorriqueño a lo largo de la segunda mitad del siglo XX y de cara al nuevo milenio. Myrna Báez ha sido también una figura crucial en la divulgación del conocimiento acerca de las artes plásticas en su país, y uno de los elementos claves en la promoción de la educación artística en Puerto Rico. Como feminista comprometida, Báez también ha sido responsable de promover la carrera de muchas de las jóvenes artistas puertorriqueñas más importantes mediante su afiliación a la Asociación de Mujeres Artistas”.
Su retrospectiva más reciente y más completa fue Una artista ante su espejo, 2001-2002, curada por la crítico y profesora de arte Margarita Fernández Zavala. En ocasión de aquella exposición, para la cual se produjo un libro monográfico de enorme valor, Fernández Zavala señala: “El género de la plástica que mejor la define es el retrato. Primero ha retratado a su familia y a sus allegados convencida de que éstos son gente de su ciudad y de que ella también es parte de ese paisaje urbano, de la contemporaneidad puertorriqueña. Después, durante cuatro décadas, ha retratado el paisaje, ha iconizado la ciudad y el campo, ambos desnudos y poblados. Se ha servido del paisaje para producir las estampas más relevantes de su generación y con las que se ha insertado en la mayor de nuestras tradiciones plásticas”.
En 2014 se le dedicó La Campechada, evento internacional a cuyas actividades pudo asistir en el Viejo San Juan y la gente que la admiraba pudo saludarla y rendirle honores.
La pintora, escultora y grabadora ganó innumerables premios a lo largo de toda su trayectoria, se le realizaron múltiples exposiciones retrospectivas —así como exhibiciones especiales en su honor— y su obra es parte de importantísima de colecciones privadas y de los más prestigiosos museos a nivel internacional, tanto en Latinoamérica como en Europa y Estados Unidos.
* Comunicado de prensa enviado por Vanessa Droz.