Grandes músicos de Puerto Rico: Juan Santana Rodríguez, El Petatero: agrónomo y trovador
Si lo piensas bien, la tarea del historiador es como la del detective.
(David Herbert Donald, 1920-2009)
El mundo está lleno de cosas obvias que nadie observa ni por casualidad.
(Arthur Conan Doyle, 1859-1930)
Juan Santana Rodríguez nació en el barrio La Torre de Sabana Grande el 17 de julio de 1928. Sus padres fueron Isabel Rodríguez Vidro y Mercedes Santana. Los que conocieron a don Juan lo describen como un fiel defensor de la décima. Uno de los colegas trovadores de don Juan, Ismael Colón Cortés, lo describe como un trovador muy creativo que componía nuevos tipos de seises y de aguinaldos. Añade Colón Cortés que don Juan escogía muy bien los lugares y las ocasiones donde exponía su arte decimal. Era decimista repentista; escribía, improvisaba y cantaba sus décimas al momento.
No le conocí, aunque me da la impresión de que pudimos haber coincidido en algún programa de televisión o en algún foro, tarima o magno evento. Posiblemente fue en el programa televisado “Borinquen canta y baila” que producían Edga y Castor Roldán durante la década de 1980. Puede ser que lo vi en televisión. De cierta manera, escribir este artículo ha requerido investigación detectivesca. Parte de estos datos han sido aportados por sus hijos y por su viuda. Otros los obtengo del mismo Juan Santana Rodríguez en sus notas, décimas y decimillas, pues algunas de sus composiciones decimales son de carácter autobiográfico. Citaré algunas de sus décimas aunque fueron tomadas de composiciones que consisten de cuatro, cinco o seis décimas o decimillas. Me hubiera encantado conocerle y conversar con él.
Esta investigación es muy retante porque los datos publicados sobre don Juan son escasos y están dispersos. Por un lado, habría que pensar en un sinnúmero de cultivadores de las músicas tradicionales que nunca grabaron. Tal vez escribieron sus composiciones decimales pero sus familiares no las publicaron ni las conservaron. ¿Cuántos artistas pueblerinos han sido olvidados por la idea de que esas cosas no tienen importancia? Sólo Dios sabe.
Sin embargo, existe un vídeo de don Juan interpretando el aguinaldo torrente en Youtube. Como parte de esta labor detectivesca, una de sus hijas, Isabelita Santana, nos informó que él concibió este aguinaldo que denominó de esa manera en honor a su lar nativo: el barrio La Torre de Sabana Grande. El Jíbaro Petatero, como se autodenominaba, también publicó un libro con una buena muestra de sus décimas. El Conjunto Típico Terruño grabó y publicó un disco compacto con ejemplos de sus composiciones y de sus interpretaciones de seises y aguinaldos. Así es que, en el caso de don Juan, existen grabaciones y documentación de su obra.
Nos dice Antonio Muñoz Loiz en sus notas biográficas de Juan Santana Rodríguez que éste nació muy cerca de La Gran Depresión. Me atrevo a escribir que en verdad nació durante la misma. Añade Muñoz que sus padres lo guiaron para hacerlo un hombre de bien. El mismo trovador nos dice en sus versos:
De niño una vida dura
He tenido que enfrentar
Teniendo que soportar
El dolor y la amargura.
Se enmarcaba en mi criatura
Mi espíritu luchador.
He luchado con valor
Pero mi triunfo he logrado
A pesar de que he derramado
Lágrimas, sangre y sudor.
En otra de sus espinelas comentó su pobreza además de su ética; nos habla de su carácter. Reconoce su humanidad y sus debilidades aunque se reafirma en contra de la avaricia:
He vivido en la pobreza
Pero Dios me ha concedido
Dos manos que me han servido
Como fuente de riqueza,
Provistas de fortaleza
Para servirle al guerrero
Incansable aventurero
Que lucha para vivir
Sin en la vida sentir
La ambición por el dinero.
No he recibido el valor
Que muchos buscando van
Pero me he ganado el pan
A costa de mi sudor.
Nunca he sido un impostor,
Nunca he sido un pordiosero.
Como soy un jornalero
De mi trabajo he vivido
Pero nunca me ha movido
La ambición por el dinero.
Sobre mí tres grandes fallos
Manifiestan sus poderes:
La música, las mujeres
Y el deporte de los gallos.
He montado mis caballos,
Incluso un potro cerrero.
Yo nunca he sido un banquero
Y aunque el vivir bien me estime
Ni me reta ni me oprime
La ambición por el dinero.
Una de las cosas más interesantes de sus escritos es la diversidad de temas comentados. En los sobre su niñez y adolescencia, don Juan menciona a sus padres en distintas décimas y decimillas. En las mismas menciona también que trabajó y luchó para sobrevivir y superarse. El trovador demostró parte de su pensamiento filosófico y su lógica ante la vida:
Cuando desperté
Al mundo en que vivo
Por algún motivo
Al mundo llegué.
No sé si lloré
Si algún frío sentí.
Poco a poco fui
Los ojos abriendo
Pero estoy muriendo
Desde que nací.
Luego de nacer
Me abrigó mi madre
Que junto a mi padre
Me vieron crecer.
Me empecé a mover
Mas luego crecí
Luego comprendí
Que en mi recorrida
Estoy muerto en vida
Desde que nací.
En otra decimilla se refiere a su origen en el municipio de Sabana Grande. Menciona a su madre quien le aconsejaba ante diversidad de situaciones. No considero descabellado pensar que para el trovador Santana Rodríguez su lugar de origen y sus padres estaban relacionados en su manera de pensar, en su memoria, en su historia personal. Quizás veía relación entre los vocablos como patria y padres, que etimológicamente tienen la misma raíz. Este tema, así como el valor del trabajo y la humildad son recurrentes en sus escritos. Por ejemplo, en la siguiente decimilla, el trovador se describe como un trabajador o jornalero:
No escondo una queja
De tiempos complejos
Porque los consejos
tuve de mi vieja.
La vida compleja
Mantuve de obrero
Siendo un jornalero
Pobre pero honrado,
Mi orgullo he llevado
De ser petatero.
En las notas a sus libro Aromas del conuco, publicado en el año 2013, don Juan señala que sus maestros en asuntos de la espinela fueron Ángel Pacheco Alvarado (f. 1971) y Gregorio Rivera Cedeño (f. 1986). Según explicó don Juan, Pacheco Alvarado publicó dos libros: Preludio de mi tiple (1936) y El tiple puertorriqueño (1964). Rivera Cedeño, descrito por Santana Rodríguez como el “espinelista por excelencia”, dejó varios poemas como “Las flores de mi jardín” y “El canto de la quebrada”, entre otros. don Juan los consideró, a ambos, sus “maestros de la espinela”. A ellos les dedicó su libro Aromas del conuco. Sin embargo, no se desprende de las notas citadas si don Juan les conoció personalmente o si les conoció solamente por medio de sus escritos o publicaciones.

Fotografía de Juan Santana Rodríguez cuando se graduó de UPR-Mayagüez, 1961.
Juan Santana Rodríguez se casó, en terceras nupcias, con Ersilia Rodríguez con quien procreó cinco hijos: Alba, Isabelita, Mayda y Juan Carlos. Don Juan era agrónomo. Algunas de sus composiciones decimales tratan de temas de la agronomía:
Mi vida es cantar
Y honrar mis valores
Y en mi jardín flores
Suelo cultivar.
Podré cosechar
Flores espinosas
pero habrá preciosas
rosas en capullo
y darte es mi orgullo
de mi huerto rosas.
Llevo en mi mano una flor
Como ofrenda al peregrino
Mientras siembro en mi camino
La semilla del amor.
En un mundo abrumador
Busco la paz silenciosa,
Busco un alma bondadosa
Que me acompañe en m viaje
Mientras llevo en mi equipaje
De mi jardìn una rosa.
Hoy busco rememorar
Que cuando yo me criaba
Mi abuelo siempre encontraba
Motivos para sembrar
El conuco y cosechar
Los frutos de nuestro suelo.
Allì encontraba el consuelo
Para aliviar su tristeza
Siendo fuente de riqueza
El conuco de mi abuelo.
Existe una crisis tal
En el hombre del presente
Que se aleja impunemente
Del deber y la moral.
En el globo terrenal
Hoy el hombre se apresura
En cavar su sepultura
Frente al vicio y lamento
Y uno medita un momento
En bien de la agricultura.
Es asombroso e interesante el hecho de que don Juan creaba seises y aguinaldos nuevos aunque no tocaba instrumentos melódico-armónicos. Don Juan no tocaba ni cuatro ni guitarra. No tocaba el acordeón ni la armónica. Solamente tocaba el güiro, güícharo o carracho. Pero en algunas de sus composiciones en décimas nos habla de los instrumentos musicales:
Mi viejo me hizo un regalo
De algo que tú no recuerdas:
Un cuatro de cuatro cuerdas
Y las clavijas de palo.
Hoy que mi memoria escalo
Llega un recuerdo halagüeño
Un breve historial reseño
De grata recordación
Que enmarca la evolución
del cuatro puertorriqueño.
De un tronco de guaraguao,
de jagüey, espino o roble
nace el instrumento noble
que da vida al seis chorreao
y al llegar al soberao
de nuestro hogar borinqueño
hace despertar del sueño
aquel que duerme en la estancia
la singular resonancia
del cuatro puertorriqueño.
Solo mi guitarra puede
El silencio interrumpir
Es tan noble su existir
Que rendirle honor procede.
Juro que mientras me quede
El sentir que me enamora
Cantaré a la verde flora
Y en armonioso compás
Las notas escucharás
de mi guitarra sonora.
Hay un vegetal
Que después de seco
Deja oír su eco
En un festival.
Tiene una especial
Cualidad que admiro
Y en un son guajiro
Como bien sabrás
Mantiene el compás
El que toca el güiro.
En otras composiciones decimales don Juan discurre sobre la décima misma, sobre su forma, su rima, métrica y particularidades:
La décima de Espinel
Se perfeccionó en España
Remontando a la montaña
Cual jinete en su corcel.
El jíbaro amante fiel
La cantó cortando leña.
En nuestra cultura isleña
Goza de la distinción
De ser sublime expresión
Del alma puertorriqueña.
Nuestra expresión decimal
Exige entre sus respetos
Diez octosílabos netos
Y analogía excepcional.
Dominio gramatical
Ante aquel que la reseña,
No es blanca ni trigueña
Mas de ayer hasta el momento
Representa el sentimiento
Del alma puertorriqueña.
La décima es exigente
Manteniendo su nivel
Y el pintor con su pincel
Puede pincelar su frente.
Es la cristalina fuente
Que brota bajo la peña
Aquel que se desempeña
Descifrando su belleza
Verá en ella su grandeza
Del alma puertorriqueña.
Don Juan Santana Rodríguez era independentista según su viuda doña Ersilia. Ese ideal político es evidente en las décimas siguientes:
Es la décima el poema
Que reviste de excelencia
Lleva del verso la esencia
Para perfumar un tema.
Sirve al trovador de emblema
En la patria borinqueña
Y aquel que ser libre sueña
Canta y en silencio gime
por ser expresión sublime
del alma puertorriqueña.
Considero genial su comentario o su discurrir sobre el sentido común ante la falta de libertades políticas, ante el vil colonialismo:
Todo lo acepta por bueno
Aunque en mil problemas entre
Siempre y cuando se encuentre
Con el estómago lleno
Aunque duerma en el sereno
Y viva en la soleded
Si hay una oportunidad
De progreso no responde
y en a penumbra se esconde
quien teme a la libertad.
Hay quien sueña con riqueza,
Vive soñando despierto
para encontrarse cubierto
con un manto de pobreza.
Le cobija la tristeza
Que le trata sin piedad.
Se oculta en la oscuridad,
Es víctima de su error,
Vive ammarrado al temor
Quien teme a la libertad.
Me parece muy evidente que el trovador tenía sus preocupaciones sobre la realidad ecológica del País:
Con honda tristeza
Contemplo el paraje
Luciendo el paisaje
en franca pobreza.
La naturaleza
Calló el canturío.
Pinta el bosque umbrío
Una triste escena
Y hoy solo hay arena,
Ya se secó el río.
No existe el riachuelo
Que antes existía.
En la serranía
Se desnudó el suelo.
Hoy no existe el velo
En blanco atavío
Del fresco rocío
que baña la caña
porque en la montaña
ya se secó el río.
Juan Santana Rodríguez con su conjunto Preludio. El cuatrista es Juradito. El guitarrista es de apellido Guzmán aunque le dicen Bonanza.

Juan Santana Rodríguez con su conjunto Preludio. El cuatrista es Juradito. El guitarrista es de apellido Guzmán aunque le dicen Bonanza.
Datos que faltaban y que arrojan luz sobre la figura de Juan Santana Rodríguez
Me parece interesante que, en este caso, en un artículo biográfico sea la persona de quien se escribe el que escribió inadevrtidamente sobre sí mismo. Con toda probabilidad no tuvo la intención de una autobiografía pero igual nos resulta curioso al escudriñar sus décimas y decimillas. Éstas arrojan luz sobre su pensar y su carácter. Sin embargo, recibí de sus hijas Alba e Isabelita la siguiente información muy valiosa. Don Juan fue el cuarto de siete hermanos. Su padre Mercedes le enseñó a interpretar el cante jondo viequense, una de las modalidades del seis.
Juan caminaba dos horas para tomar sus clases en la escuela primaria Luis Muñoz Rivera. El trayecto de regreso era el mismo. Durante su niñez iba con sus hermanos y con otros músicos al bosque de Susúa para llevarles música a los guardabosques. Fue reclutado por el ejército. Siendo soldado participó en actividades artísticas en Panamá, Japón y Corea. Después de licenciarse de las fuerzas armadas continuó estudios y terminó su escuela secundaria en la Escuela Superior Minillas de San Germán en 1956. Se graduó de ingeniero agrónomo en el Colegio Universitario de Mayagüez en 1961. Trabajó en el bosque de Susúa donde sembró árboles. Hacia 1961 se trasladó a Caguas para ejercer como maestro educación agrícola y extensionista de la Estación Experimental de Gurabo. Allí realizó estudios de la caña de azúcar.
Se casó con Ersilia Rodríguez Ortiz en 1963. Con ella procreó cuatro hijos: Isabelita, Alba, Maida y Juan Carlos. Don Juan había tenido otros hijos de matrimonios anteriores: Marcos, Doel y Alicia.
Juan Santana Rodríguez se inició como trovador hacia 1963. Estuvo bajo la tutela de Ángel Pacheco Alvarado. Gregorio Rivera Cedeño, trovador, le instó o motivó a improvisar.
Participó en programas radiales y televisados como “Tribuna del Arte” de Rafael Quiñones Vidal. Compartió con trovadores de la talla de Luis Miranda, Joaquín Mouliert, Gregorio Rivera y La Alondra. Participó además en la organización de la Fraternidad de Trovadores y Autores de la Música Típica en Caguas y en otros municipios.
Alrededor de los años 1983 al 1986 obtuvo primeros y segundos lugares en los certámenes de trovadores de la Feria Bacardí. También formó parte del Ballet Folklórico Borinquen de Nydia Rivera.
Fue integrante del grupo Los Soneros del Turabo del cuatrista Francisco Alicea. Santana creó su propio grupo denominado Preludio. Luego, hacia el 2006, colaboró estrechamente con Salvador Torres y su grupo Terruño.
El aguinaldo torrente (que en otro escrito aparece como torrense, gentilicio de La Torre) concebido de su autoría está basado en una secuencia armónica (tocada en sol menor en el vídeo publicado en Youtube) en compás de 2/4: i|iv| i| iv| III| V| i| i (bis) iv| iv| III| III| V |V| i| i (bis). En 2011 el Conjunto Típico Terruño le grabó varias composiciones de don Juan en el disco compacto titulado “Lágrimas, sangre y sudor”, título tomado de una de las composiciones decimales de El Petatero. El mismo Juan Santana cantó algunas de sus piezas. Fue incluido uno de los tipos de aguinaldos concebidos por El Petatero: el aguinaldo de la rosa. Podemos añadir el aguinaldo torrense, aguinaldo Turabo, aguinaldo rincoeño y el seis petatero. El gestor cultural Lucho Echeverri lo recuerda como El Trovador de los “muchos estilos”. Alrededor de una centena de sus décimas y decimillas fueron recogidos en su libro Aromas del conuco (2012). Son muchas de sus décimas las que no han sido publicadas. Escribía sobre temas profundos e importantes. Falleció el 14 de marzo de 2019. Él mismo había escrito:
Quiero ser libre y volar,
Libre como el pensamiento,
Libre como lo es el viento
Que nos azota al soplar.
Como las olas del mar
Que azotan mi embarcación
Pero al llegar la ocasión
En que mi cuerpo sucumba
No me lleven a una tumba
Hagan una cremación.
En cada municipio debe haber ciudadanos que tienen el interés, talento y la sensibilidad de recopilar la información sobre sus músicos, lutieres, artistas y próceres. Cada familia debe tener en cuenta que algunos de sus mayores contribuyeron a la cultura comunitaria, municipal, y por ende, a la nacional.
Referencias:
Aguinaldo torrente=Cuatro de Puerto Rico, Típicos del Turabo de Francisco Alicea, 3:03, https://youtu.be/eOICkV4OFe4
Conjunto Típico Terruño, “Lágrimas, sangre y sudor”, disco compacto, 2011.
Notas biográficas de Juan Santana Rodríguez aportadas por sus hijas Isabelita y Alba Santana Rodríguez, escrito inédito.
Santana Rodríguez, Juan. Aromas del terruño, Gurabo: el autor, 2012.