International Dub Ambassadors a sanar al país con su álbum debut
EL EP RELEASE SE POSPUSO PARA ESTE DOMINGO 12 DE OCTUBRE
A LAS 10PM / EN LA RESPUESTA
«Just one good spliff man, a-heal a whole nation.»
Así comienza el disco requete-esperado de los International Dub Ambassadors, cuyo lanzamiento oficial al fin se dará este viernes 10 de octubre en La Respuesta. La voz reverbera –pero no llega a difundirse completamente antes de que entre el bajo a desplazar nuestro sentido del tiempo. Por suerte ahí entra la batería con un corte ultra grooveado e inesperado, seguido por el trombón, las guitarras, los órganos y los sintes, que dan vueltas a la cabeza hasta encapsularte. El primer tema, “The World Cure”, sirve como base para lo que viene. Esto es DUB genuino, del que te lleva a otro nivel de conciencia, del que no tiene prisa y por eso confías en su viaje.Los “Ambassadors” empezaron en el 2009, cuando se reunían en el Café 103 de Río Piedras (R.I.P) a tocar en los “Dub Nights” para cualquiera que se apareciera. Tuve la oportunidad de verlos una vez allí y recuerdo haber pensado: “¡A Dios! Pero esta gente ha estado toda en bandas juntos… Microbios (Punk), Kaya (Reggae) y Cellar Door (¡¿?!). ¿¿¿Y ahora… le están metiendo al DUB Legit???”. Esa duda duró poco. Desde la primera nota, lo que había ahí era “roots”: músicos jóvenes de primera clase tocando con entendimiento y con respeto por la historia del reggae, al tiempo que se permitían explorar el territorio, cada cual tirando detenidamente de sus propias influencias.
En ese momento la banda sólo contaba con cuatro integrantes: Javi Pérez (guitarrista, bajista), Pachy García (teclados), Marcos Rodríguez (guitarra) y Bobby Conelly (batería). Desde entonces, los hemos visto continuar sus carreras en muchísimas bandas y distintos géneros, pero al fin y al cabo siempre regresando a los “Dub” para el desquite y la liberación del alma. Así también han ido añadiendo hermanos a la banda, como el inventivo Daniel Lopresti (teclado), Arturo Vergues (trombón) y la voz inmediatamente reconocible de Bebo Rodríguez.
Ahora, luego de tanto tiempo, de tantas reformaciones y mutaciones, qué más habríamos de esperar del origen de su disco debut si no que fuese inesperado y firmemente basado en la espontaneidad. Javi Pérez, líder de los “Ambassadors”, lo explica así:
Fue súper espontáneo. Estábamos tocando en LA y el mismo día que nos regresábamos decidimos ‘Fuck it, a grabar!’. Los temas los grabamos en 4 horas (piano, bajo y batería) y todas las canciones fueron creadas ahí mismito. Luego, al regresar a la isla, compuse las melodías y los motif. Se grabaron overdubs, pero lo que se grabó a cassette en L.A., fue casi ‘first take’, todo en 4 horas.
Entonces le tocó el turno a Bobby –doblando como ingeniero musical para la mezcla– buscarle su espacio a cada elemento. Lo hizo mano a mano con Javi, aunque éste nos aclara que “Obviamente, Bobby es el que mueve los faders, jeje”. Acá Bobby se muestra diestro en conseguir un sonido lo-fi, el cual combinado con gustos modernos nos logra colocar en un ambiente sonoro repleto de los clásicos ecos y “fader rides” de la vieja escuela del dub. Sería difícil imaginarse estas grabaciones sin ese sonido tan particular del dub clásico.
Para cualquier otra banda ese sería el fin, pero como ya ven, los “Dubs” no siguen ninguna lógica tradicional, sino que siempre buscan trascender. Nuevamente, los dejo con Javi:
El disco iba a ser completamente instrumental. Cuando lo terminamos de mezclar y ya estaba listo, dije, ‘Esto necesita un cantante’. El primer nombre que me vino a la cabeza fue el de Bebo. Es un cantante súper ‘up and coming’ aquí en Puerto Rico y siempre hemos estado en contacto, colaborando y tocando juntos.
Bebo, recién graduado de la escuela de música de Berklee en Massachusetts (lazo conector para la mayoría de la agrupación) y percusionista actual de Cultura Profética, fue un “no brainer” para la banda. Su voz, para aquellos que siguen a la escena, es inmediatamente reconocible. Es medida e impredecible en su rima. A pesar de que fue grabada al final del proceso, parecería haber existido siempre en la mente de sus creadores.
En fin, entre la espontaneidad y el caos, los Dub Ambassadors crearon un clásico; una oda a sus influencias –Augustus Pablo, Scientist y King Tubby– mientras que hacen de lo suyo. Es un disco colmado de melodías, “bubbles” y exaltaciones a la paz y el amor. Los exhorto a pasar este viernes 10 de octubre por La Respuesta, no sólo a escucharlos en vivo, sino también a llevarse su copia del disco, cuya portada y demás arte es aportación de otro hermano espiritual de la banda, Marcos Pechio. Marcos capturó la esencia de los International Dub Ambassadors con imágenes cargadas de humor, complementadas por los colores de Javi Matu y tipografeadas por Christine Fraguela.
¿Y mi tema favorito? “Ambitious Woman”. Lo podría escuchar de corrido todo el día. Para mí, es el “bubble” más rico del disco. El viernes me dicen cuál es el suyo.
*Publicado originalmente en PuertoRicoIndie.com.