En la adaptación de Wes Anderson del inimitable Roald Dahl, «The Wonderful Story of Henry Sugar» cobra vida. Anderson, hábilmente, traslada la narrativa a la pantalla con una sutileza que respeta la intriga de Dahl. La interpretación excepcional del elenco contribuye al toque distintivo de Anderson. El personaje principal, Henry Sugar (Benedict Cumberbatch), un millonario de los juegos de azar, se encuentra con un enigma: un hombre que ve sin ojos. Henry se embarca en un viaje espiritual y de redención, llevándonos a explorar la dualidad de la naturaleza humana. La voz de Roald Dahl (Ralph Fiennes) guía este cuento, una joya cinematográfica que atrapa la imaginación.