Tras . tocar de Chloé Georas “textobjeto” convertido en libro electrónico

Tras . tocar de Chloé Georas
Según la introducción del libro, el proyecto «tras. tocar» comienza con unos «textobjetos» y culmina en el libro electrónico. La autora lo explica así:
«El verbo «trastocar» puede significar trastornar, alterar o subvertir algo y, en su acepción pronominal, hasta trastornarse o perturbarse. Se puede a su vez dividir el verbo en dos palabras, «tras» y «tocar», las cuales en conjunto le añaden una dimensión poética, inadvertida y etimológicamente ficticia al verbo. Esto me llevó a trastocar el verbo «trastocar» con un punto entre las dos palabras que a su vez la componen («tras . tocar») de tal manera que pudiera representar visualmente sus complejidades y redefinir el verbo como «alterar el orden que mantienen ciertas cosas o el desarrollo acostumbrado de algo como consecuencia del tacto». Mi exploración de la propuesta se desplegó tanto en la escritura de los textos de esta publicación como en la creación de lo que denominé «textobjetos».
Previo a la publicación de este libro, diseñé y armé varios «textobjetos» que enviaba poco a poco por correo regular a un puñado de personas íntimas. Eran objetos hechos a mano con elementos textuales que requerían ser irreversiblemente «tras . tocados» por sus destinatarios para poder desencriptar sus signos. En retrospectiva me imagino cada textobjeto como una suerte de mini instalación en un sobre.
Ese viaje en sobres a la merced de los sistemas de correo tradicional le añadía un suspenso y una temporalidad impredecible al periplo de los textobjetos hacia sitios dispersos del mundo. Disfruté imaginar cómo cada uno sería desentrañado de maneras múltiples en las manos de esas personas, cuyas llamadas, mensajes de voz, mensajes de texto y correos fueron una parte crucial del arco de los textobjetos.
Agradezco infinitamente a esas personas la confianza incondicional de poder mandarles esas materializaciones de conjuros extraños, las cuales siempre se mantenían al margen de mi propia comprensión por más que las conceptualizara y planificara. Fueron ellxs quienes «completaron» de alguna manera esos objetos azarosos.»

Wind Web
El libro en las voces de Áurea María Sotomayor, Vanessa Vilches y Érika Fontánez:
«Ahora, los textobjetos de Chloé Georas asumen una tercera dimensión: se desplazan, son tridimensionales, y abrirlos significa trastocarlos. El último impulso, generado por la invitación a leer y a tocar, lleva implícito la posibilidad de liberarlos de las manos de la autoría. Así, el tocar adquiere sentido y vincula dos partes inicialmente separadas, mediando la generosidad que circunda la entrega táctil (envío, exposición, publicación) con la invención y la imaginación que el afecto estimula en las neuronas de aquello que se halla entre manos. Violencia y resistencia se entretejen: la violencia profunda ejercida contra la mujer, la agresión institucional proveniente de los claustros universitarios, el mens rea de todos los días, pero también la insistencia en una escritura que transforma el agravio en reciedumbre y fuerza. Trastocar, transformar, “transicionar”. La trayectoria se aviva entre las fotos impregnadas de un toque emblumado (azulado), que conforman el testimonio silencioso y post-humano donde se sigue deshaciendo y tejiendo el hilo de los vocablos, de los afectos, de las traducciones que trastornan el sentir y los sentidos. Aquí, trastocar es la metáfora de pase, el desplazamiento que trastorna lo sentido, tan frágil.»
–Áurea María Sotomayor, escritora y profesora de la Universidad de Pittsburgh
«Como el punto que escinde el título Tras. Tocar, Chloé S. Georas deambula por la maravilla de lo poco o de la cicatriz, su excesivo contrario, para armar poemas que desbaratan nuestra forma de percibir, que es leer con el cuerpo. Nada nos prepara para ser testigos del apocalipsis cotidiano de los genocidios, de las migraciones, de la naturaleza, de los vínculos afectivos, de las cuarentenas. La perturbación que provocan los poemas de este libro bilingüe se logra desde el punto que separa las palabras, desde las fotografías que confrontan la expresión, desde la traducción que sabotea la soberbia de un único significado, desde las imágenes-explosivos o el uso de la pregunta vertical. Porque la palabra es herida, pregunta,
es errabunda, la poeta exige de lectoras/es valientes que caminen por los cuerpos minados de sus poemas y sus fotografías. Este libro objeto, quiere alterar, sin recomponer. Tras. Tocar es también des.ordenar, llamar de otra forma la lectura. Ya lo advirtió Thea: la lengua es un músculo rompe huesos.»
–Vanessa Vilches Norat, escritora y profesora de la Universidad de Puerto Rico
«Tras. tocar es universal, profundo, transgresivo, valiente. Cada poema desarma nuestra complacencia. Es un alto inequívoco contra la inercia del desentendimiento y la complicidad con lo que acontece. El apocalipsis no es futuro, ya está aquí, en cada soplo de cotidianidad, en los silencios, en la calma que sabe ocultar con sábanas blancas lo que muere a plena vista. No es posible salir ilesa de esta poesía. Son versos que enuncian y denuncian la condición de época, a la vez que reivindican las fuerzas vitales en un mundo en pedazos, en que la existencia misma colapsa. Se invoca el tras.torno existencial, para luego posarse con la misma fuerza a un nivel más íntimo. La debacle se conjura en la crisis civilizatoria pero se personifica en nuestra intimidad más singular. En este desafío llega una poesía que evoca esperanzas ante el dolor, intentos de cierre para las cicatrices y la potencia misma de lo humano. Esta poesía encarna una voz que no se deja porque después de todo, viene de un profundo amor por la vida. Tras . tocar es filosofía, es poesía activista, es el lenguaje vivido de una guerrera apócrifa.»
–Érika Fontánez Torres, profesora de la Universidad de Puerto Rico

Winged Fortress
Poemas
I.
Hay lugares donde la desolación decora los espacios
Túmulos de humedad abultan las paredes
helando los vacíos con sus exhalaciones
Esas paredes conocen la mecánica de las heridas
Cuántas caricias suman una traición
Cuántas cicatrices suman un cuerpo
Nadie sanará la sal de esta estancia
Nadie contabilizará el éter de este desastre
Nadie compartirá este cielo de varillas explotadas
Hay lugares donde cuchillos suspendidos conjuran sobre juegos distraídos
y francotiradores esperan siglos por el arqueo de una espalda en plena carcajada para
disparar
¿Acaso no será la calma el mantel blanco que esparcimos sobre las masacres?
II.
mens rea
(menz ray-ah) n. Latin for a «guilty mind,» or criminal intent in committing the act.
West’s Encyclopedia of American Law (2008)
Men’s rea
Maybe if their names were on random tombstones of past centuries
safely illegible on other continents, it would be OK
A friend once told me
«you can love an institution, but it won’t love you back»
Even then he was afraid of naming
It’s never just not-love
Never a neutral gray ether with flying bullets
Never simply casualties of not-love
Nothing quite prepares you for witnessing a dear woman crushed
and meticulously recrushed under exhausted remedies
It’s all always there in the courtyard
Bromeliads collecting blood on white pebbles dotted with flesh around the pond
They won’t harden nor evaporate
Undecomposable
Uncompostable
The janitors reorganize them daily with their mops
An institution is never just an «it»
Its it-ness also has hands signatures maps plans planned ahead:
Men’s rea
And what of us that are still here? Not survivors
There is nothing «post» here
No archived, neatly classified scar encased in glass
Mourners of a death that won’t die
If anything, it’s a new disorder: S.T.S.D.
Simultaneous Traumatic Stress Disorder
Another S.T.D.
Sexually Transmitted Disease
III.
cuarenteRna
todos somos asesinos en serie
con tan solo respirar exterminamos
causa de muerte: coexistir
extraños o amados, no importa
exhalar es el nuevo bombardeo amigable
los más viejos más oscuros más pobres quedarán coronados por tubos con pitidos que revuelcan las batas enmascaradas corriendo por los pasillos mientras una mano de goma se detiene en pleno forcejeo para acariciar a otro que se vuelve
des . difunto
¿cómo honraremos a todos los que hemos asesinado? ¿qué de las bolsas de cuerpos amontonados en la esquina donde un montacargas las eleva a lo que alguna vez fue cielo? ¿qué de los ataúdes atascados de camino a la incineradora? ¿qué de las historias hacinadas en las fosas tan comunes?
des . oídas
¿cómo encontraremos las cenizas de nuestros amados? ¿y cómo es que no pudimos amar también a los extraños para al menos adivinar sus coordenadas en los escombros y nombrarlos?
im . perdonable
IV.
no hay nada más frágil que el ecosistema de una fantasía
como cáscaras de huevo bajo una aplanadora de brea
o mariposas aleteando la espuma de un maremoto que se avecina en cámara lenta
a eso se suma que todos llegamos a las fantasías con las maletas llenas de cosas, incluso a veces con almacenes repletos de artefactos con cicatrices susurrando jeroglíficos que ni un oráculo podría desencriptar
uno que otro artefacto logra unirse a alguna fantasía, pero otros se asoman a ella con una sonrisa atómica como la de tu cuerpo que vuela cada noche a ese museo de objetos ebrios donde curadores los embalsaman en maletas alfabetizadas y numeradas
aunque no las nombres ni las abras, esas maletas misteriosas pululan cerca de mis manos como ensayando pertenecerme luego de tantas audiciones con otras manos
nuestra casa murmulla como si presagiara el almacén que se avecina
tus maletas se unen al gabinete de curiosidades
esa colección de trizas reconfiguradas de moléculas a destiempo
cosas de viento y de agua
hemos manufacturado nuevos artefactos para la próxima fantasía
Tras. Tocar
libro electrónico de poesía bilingüe e imágenes
por Chloé S. Georas
Disponible en las plataformas principales de libros electrónicos, incluyendo Kindle y Apple ebooks: https://books2read.com/u/4A7G50
Chloé S. Georas escribe poesía y textos bilingües (español e inglés) y hace trabajos fotográficos/visuales. Es la autora del libro-objeto “rediviva : lost in trance . lations” (Editorial Isla Negra, 2006; Libros Nómadas, 2001), el cual fue premiado por el Pen Club de Puerto Rico. También es Catedrática de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico. Ha presentado y publicado su trabajo creativo y académico en Puerto Rico y otros países.