Unión permanente vejaminosa
No puede catalogarse más que de xenofobia prepotente e imperialista que una juez de California dictamine quitarle a una madre la custodia de su hijo porque en Puerto Rico hay “limitado acceso a una educación de excelencia, servicios de salud deficientes y alta incidencia criminal”.
Aun cuando eso pueda ser cierto, no constituye razón para separar a una madre de su hijo. De ser así, el sistema judicial estadounidense tendría que quitarle la custodia de sus hijos a todas las madres puertorriqueñas y erradicar la maternidad en Puerto Rico. Diga usted si eso no es totalmente absurdo. ¿O es acaso que California es el emporio de la perfección?
Para colmo, la profesora universitaria Maha Abdel Rahim, puertorriqueña a pesar de su nombre, ha sido sometida a la humillación y vejamen de su arresto y trámite de extradición a California, con la sumisión y contubernio absoluto al tribunal de la Metrópoli por parte de la Policía y el Departamento de Justicia de Puerto Rico. Los titulares de Justicia y del Departamento de la Familia de Puerto Rico ahora dicen que están impotentes de hacer algo ante el designio judicial imperial.
Esta madre puertorriqueña está peleando la custodia de su hijo con su ex marido, un sirio de nombre Rasim Hallum, residente en California. Abdel Rahim aduce que su hijo es víctima de maltrato infantil, que no es bien cuidado por su padre y tiene problemas de salud.
Sabiendo la infamia de lo que estaban haciendo, hace unos días, el padre del menor y agentes de la Policía de Puerto Rico intentaron entrar al hogar de Abdel Rahim para llevarse al niño, pero cuando vieron a miembros de la prensa se retiraron del lugar. Ella se negó a entregar a su hijo a Hallum, luego que como parte de la batalla legal por su custodia, la jueza californiana Dale R. Wells decidiera que el niño podía pasar el período de Navidad en Puerto Rico hasta el pasado viernes, 4 de enero, razón para su arresto.
En esa decisión de la jueza Wells no ha pesado para nada la voluntad del niño, de nombre Kamal, quien expresó cándida e inocentemente en una entrevista con un medio televisivo de noticias que quería quedarse con su madre y no volver con su padre a California. El comisionado residente de Puerto Rico en Washington, Pedro Pierlusi, ha mirado para otro lado, ante la petición de la madre del niño, en su habitual acto de sumisión ante las autoridades estadounidenses. Nada tampoco ha hecho, hasta ahora, el nuevo gobernador Alejandro García Padilla.
Entretanto, Abdel Rahim está encarcelada sin derecho a fianza en espera de su extradición a California, severidad que demuestra que no se perdona que los puertorriqueños desafíen las órdenes del sistema judicial de la Metrópoli imperialista.
¡Que viva la unión permanente con Estados Unidos!