Me quedé con ganas de compartirles más detalles de por qué a nuestra banda nos ha dado por hacer canciones, charlas y talleres explorando las conexiones entre la música boricua y la quisqueyana. Así que aquí van las razones…
Me quedé con ganas de compartirles más detalles de por qué a nuestra banda nos ha dado por hacer canciones, charlas y talleres explorando las conexiones entre la música boricua y la quisqueyana. Así que aquí van las razones…
En ese Nueva York caribeño existen poderosos circuitos musicales, espirituales, educativos, sociales y activistas que conectan a boricuas y quisqueyanos de múltiples maneras.
La alegría de que se dedique el Festival de Claridad a la comunidad dominicana provoca un diálogo con músicos de nacionalidades diversas y mestizas sobre la necesidad de ampliar el intercambio artístico y comunitario.
I loved this novel the first time I read it in its original Spanish edition under the title «Sin ti no soy yo». And I loved it just as much now that I read it in its English translation titled «Not Myself Without You».
La colaboración entre la movedora (es decir, coreógrafa/bailarina y más) Noemí Segarra y el percusionista Henry Cole titulada «De rumbo de rumba» inaugura el ciclo de conciertos el 7 y el 8 de abril.
El 9 de febrero fue la apertura de la exhibición Latino/a Visual Imaginary: Intersection of Word & Image en Albuquerque, Nuevo México. Asumí que los artistas boricuas brillarían por su ausencia…afortunadamente me equivoqué.
El cantautor mexicano Rana Santacruz tiene a Chavela Vargas, Agustín Lara, The Pogues y Tom Waits como influencias musicales….»folk alternativo» indeed.
Hace un año que Luis Díaz Portorreal murió. Este artículo recuerda la genialidad del que fuera llamado Patrimonio cultural dominicano por el Consejo Nacional de la Cultura de la República Dominicana.
«Al momento de yo recopilar todos los poemas que van desde Nueva York, Francia y Puerto Rico me di cuenta de que había un hilo conductor que no era necesariamente la cabeza sino los pies, el tránsito.» Yarisa Colón Torres
Desde El Barrio, Nueva York, hacía llamadas telefónicas y mandaba correos electrónicos, uno tras otro. En dos meses viajaría a Puerto Rico a presentar mi primer CD musical Las 7 salves de La Magdalena y necesitaba músicos que tocaran salves dominicanas.