La década del treinta me sirve de pretexto para captar el espesor y contradictoriedad de este impulso de solidaridad tan necesario como imposible en el Caribe.
La década del treinta me sirve de pretexto para captar el espesor y contradictoriedad de este impulso de solidaridad tan necesario como imposible en el Caribe.
“Estoy con los pobres ahora, los infelices claros, los mendigos que hacen de la rosa una gran corona de estupor. Estoy con los pobres, digo, Y los labios no suenan a mentira…” –Francisco Matos Paoli Canto de la locura (1962) […]
En Ñam-Ñam no hay sentido, ni afuera, una vez se ha sido devorada por la mar. No hay afuera sensorial en la incorporación sensible de lo que nombramos con la palabra “música”.
través del siglo veinte Puerto Rico y Nueva York desarrollaron unos fuertes vínculos musicales, los cuales fueron de gran importancia para el desarrollo de la música popular puertorriqueña. Aunque los orígenes de tales vínculos no se conocen claramente, se puede […]
Por más de 200 años, Haití ha sido presentado maliciosa e ideológicamente al mundo como un enigma, un país dominado por una cultura y antropología que se suponen como incomprensibles para el mundo exterior.
Apostar a la utilización de medidas neoliberales para “arreglar” un país es característico del tecnócrata mediocre. Sin embargo, la nobleza del alquimista y la mediocridad del burócrata se encuentran en la creencia de que con sus métodos la transmutación es posible. A eso es a lo que se le puede llamar síndrome Flamel.
Avilés no se inclina a analizar el contraste entre palabra e imagen visual, sino que investiga las palabras y miradas como complejos culturales de “experiencias alternas e imaginarios complejos”.
“Aterrizan en Puerto Rico los fondos de Zonas de Oportunidad”, reporta Joel Cintrón Arbasetti para el Centro de Periodismo Investigativo.[1] Las Zonas de Oportunidad son áreas de inversión con beneficios contributivos. Intentan promover el “desarrollo económico” en “áreas deprimidas”. 98% […]
Lo más íntimo de la rosa, sea desierta o amarilla, es siempre el árbol, ese perpetuo desprendimiento de sí que vuelve a sí, al simple estar ahí, aunque lo rodeen tantos asesinos.
Hace tiempo venimos advirtiendo que los vientos que siembra Trump pronto cosecharán tempestades.
Para muchos marxistas, incluyendo a Harvey, las colonias contemporáneas son sencillamente invisibles. Para otros, estas son simples anacronismos, unos pocos entes exiguos de un pasado distante.
Quienes único pueden reinvertir en el país y repatriar sus ganancias son los empresarios del patio. Demonizarlos como los causantes de todas las penas nuestras ni es realista, ni es productivo.
Our lies reveal as much about us as our truths. J.M. Coetzee (Slow Man) l antropocentrismo es una realidad material que dirige de ordinario nuestras interacciones tanto individuales como colectivas. Entendemos nuestro entorno desde una perspectiva antropocéntrica, que por mucho […]
Es hora de salir y defender vigorosamente la ciencia en beneficio de los animales que habitamos el planeta, y dejar de tolerar la ignorancia.
La ejecución de un ser humano por el Estado es, por tanto, en nuestra tradición jurídica puertorriqueña moderna, no solo ilegal; es, ante todo y sobre todo, inconstitucional.
La democratización verdadera del país debiera estar entre las metas de las pocas propuestas de política pública que todavía se discuten, a medias, en lo que queda de espacio público para la discusión libre y la deliberación.
If we want to truly reduce violence in our communities, then we need to take seriously the police’s role in perpetrating that violence and start to think beyond policing.
Dejemos que la burguesía colonial se la juegue como quiera, que apueste al caos como medio de mantener dominado a este pueblo. Es más, que cojan cabuya. Apostemos nosotros y nosotras.
Por mas molesta que sea, por mas triste, amarga, vergonzosa o comprometedora; la verdad, seguirá siendo la verdad, y debe ser defendida.
De hecho, la única forma en que Puerto Rico en realidad puede labrar su propio destino político es siendo lo suficientemente autosuficiente para poder escoger en vez de mendigarle a sus votantes y a los Estados Unidos, el futuro que queremos para todos nosotros.
Pregunté asombrado: “¿Puedo pisar ahí? ¿Puedo subir esta colina?”. El anciano me respondió: “¡Claro!”. Entonces, ascendí, sin encomendarme a nadie. Llegué a la cima y desde allí observé toda la aldea de Ketu.