El 3 de noviembre de 1970 Salvador Allende fue juramentado presidente de su país. Su programa de gobierno se resumía en cuarenta sencillas propuestas que nos hace bien volver a mirar, aunque sea de reojo.
El 3 de noviembre de 1970 Salvador Allende fue juramentado presidente de su país. Su programa de gobierno se resumía en cuarenta sencillas propuestas que nos hace bien volver a mirar, aunque sea de reojo.
No digo que el pueblo sea ingenuo, tampoco sabio, pero sí digo que está tan agobiado y cansado de su orfandad política que prefiere la pasividad del espectador antes que expresar la más importante queja que un público pueda articular.
La opinión de la gran cantidad de personas serias que se opusieron con razones de peso a la privatización del aeropuerto Luis Muñoz Marín fue «muy superficial», a juicio del Sr. Gobernador.
En aras de restituir la credibilidad de nuestro sistema democrático, no debe soslayarse la importancia de obligar a los gobernantes a que se comprometan con un programa, con el cumplimiento de sus compromisos.
El incidente de las Fiestas de la San Sebastián deja claro que la violencia ya nos es cotidiana. Esta es la verdadera tragedia.
Es hora de exigir una reforma universitaria que nos salvaguarde de los males vividos y que coloque a la UPR en manos de los universitarios, fiscalizada, claro está, por quienes tienen el deber de exigirle que cumpla con su función social.
Al votar a favor del PPD y sus candidatos/as, el Pueblo no emitió mandato alguno a favor de la reforma legislativa o de cualquier otra propuesta incluida en su Programa de Gobierno, estemos o no de acuerdo con la misma.
Se veía venir. Nada dijo de velocidad. Lentos son los caminos de la medicina y la religión, si a eso es que se dedicará. Pero los fast-track fools también tienen sus carriles, sus pactos con el futuro y sus venganzas.
Un pase de balance sobre los retos que enfrenta el gobernador Alejandro García Padilla luego de su toma de posesión este pasado 2 de enero.
Bajaré santos para que García Padilla sea bendecido con compasión por un pueblo abatido que ansía mirar con esperanza un futuro que hoy no se vislumbra e imploraré que se les conceda sabiduría, mucho más allá de los años que tienen.
Elecciones 2012: el resultado general, el de la alcaldía de San Juan, el de los partidos emergentes y el del plebiscito. Todos, sin excepción, tienen su parte «scary», que empieza ahora!
La política electorera fulgura lo político, es decir, lo quema, lo somete a una visibilidad tan excesiva que lo abrasa, lo reduce a cenizas. Qué bueno que se fueron las elecciones. Ahora quizás, por fin, podamos re-dedicarnos a lo político.
La publicidad, como los astros, inclina pero no obliga. Los anuncios de campaña nunca tuvieron la claridad contundente que los estrategas deseaban. La calle no estaba alineada con las estrellas…
Luis Fortuño y su gabinete son la fuerza política más destructora que ha gobernado la isla desde, al menos, 1952, y se debe impedir a toda costa que la destrucción que implica dicho gobierno continúe.